MC. Ricardo Ojeda Ávalos, Desarrollo de Nuevos
Productos.
VioHache – SuKarne
Culiacán
Sin, MX. 2024. ricardo.ojeda@sukarne.com
Según
estudios realizados por CIMMYT, (Ramos S. 2023) el
rastrojo puede aportar 35% de nitrógeno, 12% de fósforo, 80% de potasio y hasta
95% del calcio de la cantidad total que aplicamos de fertilizante, donde 13,5
toneladas de maíz por hectárea sería equivalente a fertilizantes con un valor
aproximado de entre 15 y 16 mil pesos por hectárea.
Para
que los rastrojos de cosecha de maíz (o cualquier esquilmo de cultivo) liberen
los nutrientes al suelo y la planta estos deben de descomponerse primero. Este
proceso es realizado por las condiciones ambientales (sol, lluvia, viento) y en
mayor medida por la acción de los microorganismos del suelo y agua.
El
disminuir el tamaño de partícula de los rastrojos ayuda a acelerar la
mineralización, pero el factor de mayor influencia en este proceso es la
relación carbono nitrógeno (C/N)
La
descomposición de los esquilmos es lenta, debido a que la relación carbono
nitrógeno de estos es muy alta, la cual puede ser de ochenta a doscientas
partes por millón de carbono por cada parte de nitrógeno, debido a que la C/N
óptima para la degradación de estos materiales está entre 25 y 30.
Si
el porcentaje de materia orgánica del suelo al que se integran los rastrojos es
baja (menor a 5%) el rastrojo “roba” nitrógeno a la planta para descomponerse,
es por ello que cuando se implementa labranza cero o se cambia a producción
orgánica en un cultivo los rendimientos del cultivo bajas durante los primero 3
meses para después incrementar.
Esto
debido a que el suelo debe de generar reservas de nitrógeno ligado al humus
para cambiar si dinámica de mineralización de nutrientes adecuada para suplir
nutrientes de manera eficiente a las plantas.
En resumen, el uso de composta
activa en los cultivos ayuda a liberar los nutrientes de los rastrojos y
acelerar la dinámica de nutrientes en la rizosfera.